El mundo recibe el 2025: luces, tradiciones y esperanza global

Los primeros destellos del Año Nuevo
Internacionales, 02 de enero de 2025 (ND58).- Desde Nueva Zelanda hasta Sídney, los países del Pacífico Sur inauguraron el 2025 con fuegos artificiales y celebraciones emblemáticas. En Auckland, miles disfrutaron de un espectáculo deslumbrante, marcando el inicio global de las festividades.
Horas más tarde, Sídney sorprendió con un show en el icónico Puente del Puerto, donde la estrella británica Robbie Williams emocionó a más de un millón de asistentes.
Tradiciones globales que unen
En Nueva York, la emblemática bola de Times Square descendió bajo una lluvia intensa, mientras miles de personas celebraban con actuaciones de artistas como los Jonas Brothers. En Nashville, la música country fue protagonista, mientras que Las Vegas deslumbró con un espectáculo pirotécnico desde los tejados de sus casinos.

En Asia, Japón dio paso al Año de la Serpiente, simbolizando renovación y esperanza. En contraste, Corea del Sur optó por celebraciones moderadas debido a una reciente tragedia aérea.

Europa y la celebración olímpica
En París, el espectáculo en los Campos Elíseos incluyó fuegos artificiales y una proyección luminosa en el Arco de Triunfo, destacando el espíritu de fraternidad olímpica vivido en 2024. Londres iluminó el Támesis, pero Escocia tuvo que cancelar sus eventos debido a una tormenta invernal.
En Roma, el inicio del Año Santo reunió a millones de fieles, mientras Suiza y otras regiones celebraron con tradicionales zambullidas en aguas heladas.
América Latina: tradición y alegría
En la playa de Copacabana en Río de Janeiro, más de dos millones de personas vestidas de blanco disfrutaron de conciertos de leyendas brasileñas como Ivete Sangalo y un show de fuegos artificiales de 12 minutos. «Es algo mágico», expresó un emocionado turista tras participar en la ceremonia de purificación en el océano.
Reflexión global para el 2025
El mundo recibió el Año Nuevo con una mezcla de esperanza, tradición y espectáculo. Desde zambullidas heladas hasta abrazos multitudinarios, cada rincón del planeta mostró su forma única de celebrar, un recordatorio de que, pese a las diferencias, la llegada de un nuevo ciclo nos une en una emoción compartida.

¡Que el 2025 sea un año de paz y renovación para todos!
Redacción ND58 | Fuente: AP
Edición: Villasmil, Henry
Gráficas: AP