Michael J. Fox, el querido y eterno «Marty McFly» que se rebeló contra el Parkinson
Michael Andrew Fox, mejor conocido como Michael J. Fox,, es un actor canadiense-estadounidense. A los 30 años, en la cúspide de su carrera, felizmente casado y con un hijo, su vida y su carrera se vieron truncadas por el Parkinson. Le dijeron que solo podría trabajar 10 años más, pero se rebeló contra la enfermedad y el fin de su carrera. Hoy cumple 59 años, posee cinco Emmys, cuatro Globos de Oro y dos premios SAG.
Internacionales, 09 de junio de 2020 (ND58).- Michael Andrew Fox nació el 9 de junio de 1961 en Edmonton, Alberta; hijo del matrimonio formado por Phyllis Piper, actriz y encargada de nómina, y William Fox, oficial de policía y miembro de las Fuerzas Canadienses.
Su carrera en el cine y la televisión comenzó a fines de los años 1970. Entre sus papeles se destacan «Marty McFly» en la trilogía de «Volver al Futuro» (1985-1990); Alex P. Keaton en «Lazos Familiares» (1982-1989), por la cual ganó tres premios Emmy y un Globo de Oro; y Mike Flaherty en «Departamento de Crisis» (1996–2000), por la cual ganó un Emmy, dos Globo de Oro y dos SAG.
En 1985 por un golpe del destino es elegido para interpretar el papel de Marty McFly en «Volver al Futuro», después de que el director Robert Zemeckis descartase a su primera opción, Eric Stolz. La trilogía de culto convirtió así a Fox en ídolo de adolescentes y uno de los rostros más prometedores de Hollywood en esos años.
En la película, ambientada en 1985 y 1955, Michael J. Fox interpretaba a un adolescente que viaja accidentalmente al pasado y al futuro en un automóvil deportivo DeLorean convertido en máquina del tiempo por un peculiar científico amigo suyo.
Mientras el actor filmaba la película «Doc Hollywood», en el año 1991, se dio cuenta que no podía controlar las tembladas de uno de sus dedos. En otra oportunidad, el actor se despertó con uno de sus dedos del pie totalmente torcido. Luego de estos escenarios, fue al médico y se le diagnosticó Parkinson de temprana edad. Para el momento, Fox contaba con 29 años de vida.
En la cima de su carrera, felizmente casado y con un hijo, su vida y su carrera se vieron truncadas por el Parkinson, enfermedad genética y sin cura, que afecta al sistema nervioso y al movimiento. Le dijeron que solo podría trabajar 10 años más, lo que le hizo caer en una depresión y refugiarse en el alcohol.
Pero se rebeló contra el victimismo y el fin de su carrera. Con ayuda de su esposa, con la que lleva 30 años, decidió desafiar al tiempo, a la enfermedad y hacer de la necesidad, virtud. Hoy cumple 59 años, posee cinco Emmys, cuatro Globos de Oro y dos premios SAG.
Ha conseguido convivir con el Parkinson, después de una cirugía, medicación y meditación. Es uno de los mayores activistas e inversores en la lucha contra esta enfermedad en el mundo; ha escrito cuatro libros, y no ha dejado de trabajar, haciendo series en las que normaliza el Parkinson interpretándose a sí mismo o a alguien que la padezca.
El actor es muy activo en redes sociales, con más de millón y medio de seguidores en Twitter, y supera los 700.000 en Instagram.
En noviembre de 2020 publicará su cuarto libro, No Time Like The Future, An Optimist Considers Mortality (No hay mejor tiempo que el futuro, un optimista considera la mortalidad), en el que comparte sus reflexiones sobre la enfermedad, la salud, el envejecimiento, la fortaleza de la familia y los amigos.
El actor no se cansa de repetir que el Parkinson no determina su vida y que ha aprendido a convivir en armonía con esa dolencia.
El 16 de diciembre de 2002, Fox se hizo un espacio en el Paseo de la Fama de Hollywood en el estado de California, Estados Unidos, al otorgársele una estrella en el 7021 Hollywood Boulevard.
Redacción: Arismendi, Luis (@arismendiht) | Fuente web
Edición: Villasmil, Henry
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