#EnProgresivo | Se puede aprender a ser feliz y aquí te contamos cómo
Una de las palabras más buscadas en Google es felicidad, la otra es amor. Esto nos da una idea de cuan codiciado es este estado que además ha sido objeto de estudio de filósofos, religiosos y científicos. ¿Se puede aprender a ser feliz? Sí, y los libros son una herramienta indispensable en este proceso.
Maracaibo, Zulia, Venezuela, 27 de marzo de 2021 (D58).- Muchas son las reflexiones que se han generado a lo largo de la historia en torno al concepto de felicidad, Platón decía por ejemplo que la felicidad es un estado contemplativo del alma pero, más allá de los postulados, lo cierto es que existe un patrón común y es que los seres humanos estamos constantemente en su búsqueda.
La psicóloga, escritora y educadora venezolana Luciamelia García, quien dirige la Escuela para Aprender a ser Feliz, explicó en entrevista con En Progresivo que se puede aprender a ser feliz, así como aprendimos a sufrir.
«Qué sucede con esta historia, que la felicidad no es una panacea, yo no soy «gurú» de la felicidad, yo sencillamente promuevo que podemos aprender a ser felices».
Pero qué pasa en ese camino de la felicidad, resulta que existen cinco grandes obstáculos que nos desvían de la ruta: la crítica, la queja, la comparación, la competencia y el enfrentamiento. Sobre esto la psicóloga, quien también dicta la Maestría en Maestros de la Alegría de la Universidad Católica Andrés Bello, comenta que «lo triste es que todas las anécdotas, las historias están conectadas con el sufrimiento y no con la felicidad. Por qué no contarle a un hijo una historia agradable de la niñez, sino contarles historias de sufrimiento y de dolor que sencillamente el niño no comprende porque no son parte de ellos».
«Antes de criticar oferta una mejora, antes de quejarte agradece. No puedes seguir viviendo comparándote con otro porque vas a afectarte, porque no te comparas con tu igual sino que te comparas con el que tu consideras que está superior a ti o con quien consideras que está por debajo de ti», expresa la psicóloga García.
Los libros, un camino hacia la felicidad
Existe una vinculación entre los libros, la música y las emociones. Luciamelia García autora de los libros: «Cómo dejar de ser cuaima» y «Mi amigo el gay», explica que el proceso de aprendizaje de la nueva generación es diferente a generaciones anteriores y se da bajo el siguiente esquema «en ellos primero surge el interés, después la atención, luego la concentración y finalmente la motivación».
Para la especialista es fundamental que los escritores se adapten a estas nuevas formas de aprendizaje, pues sólo así podrán cautivar a esta nueva generación.
«Los jóvenes ahora manejan muy bien sus emociones. Hoy nos retan y esto debe ser asumido por nosotros los escritores, porque el lector requiere de mayor creatividad por parte del escritor para lograr procesos que los enganchen con los libros. La nueva generación tienen procesos diferentes para sintonizarse con la lectura».
En cuanto al impacto de la tecnología la también escritora insiste en la necesidad de que el medio educativo haga gala de la creatividad.
«Desde el punto de vista psicológico existen una cantidad de mitos en relación con la utilización de la tecnología que ha desarrollado una serie de capacidades como las multitareas, las investigaciones, observación. Las nuevas tecnologías sí impactan en nuestros jóvenes», asegura la psicóloga.
«Imagínate si hay un impacto que de tanto la gente decirme si existe una fórmula para la felicidad, yo decidí crear una fórmula para la felicidad y dije que la fórmula es 3P + 6C».
Despejando la fórmula de la felicidad | Fórmula de la Felicidad 3P + 6C
Esto se traduce en: Piensa, procesa y procede y las 6 C son: compromiso, creatividad, compasión , cooperar compartir y contribuir. «Entonces quedamos que la felicidad y el avance de la tecnología va a estar signado a pensar, procesar, proceder, comprometerse con creatividad con pasión y cooperar para compartir y contribuir».
La relación con los libros continúa viva en la experiencia que como educadora por más de 40 años ha tenido Luciamelia García quien señala que el modelaje de los padres tiene mucho que ver, así como la familia, la educación, los profesores, los maestros y la tecnología.
«Los libros impresos se van a mantener y seguirán las nuevas generaciones escribiendo y publicando en sintonía con su generación sobre los temas de interés que los unan. Seguirán existiendo los clásicos y se mantendrán siempre y cuando se les venda la idea de leer no como una obligación sino, como una contribución a su desarrollo», dice la psicóloga y educadora.
Sobre el proceso de criar a un niño lector la experta señala que lo primero es acercarlos a los libros «estamos frente a una nueva generación asertiva, directa que dicen lo que sienten y los padres deben aprender a marcarles los límites del respeto y así crear una alianza para manejar unos valores, que son los valores del amor, la compasión y del respeto. Recomiendo así mismo dejarlos expresar sus emociones de forma natural eso sí, enseñarles, manejarlas internamente con esto quiero decir control versus explosión. Si yo como mamá exploto y modelo la conducta de un ataque de ira yo no puedo pretender que el niño no copie ese mismo ataque de ira que me dio a mí y las transfiera a su mundo de relación».
¿Y qué ocurre con la «Generación de Cristal»?
«Yo no estoy de acuerdo con esa historia de que es una generación débil, yo digo que es falso por el contrario tienen fortalezas que en muchos casos lo padres y educadores desconocen y quiero señalar que en esta generación se le da fuerza a los aspectos negativos que a los positivos que los niños tienen, entonces esta generación llamada cristal tienen unas características que los padres no saben manejar», dice García.
Detalla que esta llamada «Generación de Cristal» son niños que no gritan, ni tiene rabietas exasperantes para los papás, gozan de una energía positiva única y la encaminan para hacer el bien, son niños con un nivel de conciencia elevada. Hablan pausadamente con calma sin estridencias, hablan poco pero con mucha profundidad, son extremadamente sensibles a todo su medio ambiente, sonidos, colores, olores emociones negativas, tienen una gran conciencia de grupo y una gran capacidad creativa avalado por ser sumaste ingeniosos.
«Hay una cantidad de etiquetas lamentablemente que para mí no son aplicables a todos los nacidos en una época, porque pretenden meter a todas las personas en un mismo saco. Esta generación tiene conciencia sobre su rol social, tienen altas actitudes para la creación y la imaginación», agrega.
Explica Luciamelia García que hoy en día muchos de estos niños brillantes son diagnosticados con falta de atención. «Tiene un desarrollo temprano por el interés de múltiples áreas del conocimiento, «googlean», utilizan la tecnología para verificar si lo que les estás diciendo es cierto, suelen ser altamente observadores con capacidades intuitivas desarrolladas y eso está demostrado científicamente».
La escuela para Aprender a ser feliz tiene académicamente 220 horas para graduarse de Maestro de la Felicidad . Es un diseño curricular completo de todas las materias que hay que ver académicamente.
Es la única escuela para aprender a ser feliz que existe en el mundo. Trabajan con en talleres, conferencias, simposios para darle a la gente las herramientas para aprender a ser felices, la motivación y la alegría, y el aprender a ver la actividad laboral como una felicidad.
La psicóloga especialista en área clínica nos invita a aprender a utilizar la llave de la felicidad que es: Tu sonrisa. «Párate frente al espejo y haz muecas hasta que te salga tu sonrisa, como eres tú y vas a ver que tu rostro cambia».
La mejor manera de ser felices es concentrase en vivir, disfrutar, sentir y ser tú, que no te pareces a ninguno.
Redacción ND58 / Ávila, Yeimy @EnProgresivo
Edición y pódcast: Villasmil, Henry
Gráfica: Cortesía